Las mejores curiosidades científicas del baloncesto

Siempre hemos pensado que en los deportes, ya sean individuales o colectivos, es fundamental factores como la fuerza, el físico o la técnica de los deportistas; sin embargo pocas veces tenemos en cuenta otros factores determinantes y que están relacionados con la ciencia.

Existe un amplio mundo científico ligado al deporte ya que, en muchas ocasiones, la ciencia puede influir en cada momento, determinando incluso la victoria o lo derrota en cada encuentro. Un buen ejemplo de ellos son aquellos deportes que se juegan con un balón o pelota y entre los que se destaca el baloncesto.

Son muchas las curiosidades científicas que giran en torno al desarrollo de esta disciplina, como son las matemáticas o la física. Podemos observar que estas disciplinas están presentes en los propios elementos de juego, como es en el balón o en la ejecución propia de los jugadores. Todas estas observaciones científicas son estudiadas para intentar que el juego se profesionalice y sea más eficiente.

A continuación os dejamos con algunas de las más curiosas:

1. El tiro libre perfecto existe

Hace veinte años los doctores Chau Tran y Larry Silverberg desarrollaron un sistema de simulación informática que permitía calcular cuál era la forma óptima de lanzar un tiro libre. La investigación, que se llevó a cabo en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, tenía en cuenta variables tales como la altura del jugador, la posición del lanzamiento, ángulo, fuerza/velocidad, efecto de rotación, etc.

Cinco años después, tras simular millones de lanzamientos en 3D y procesar los datos obtenidos, llegaron a las siguientes conclusiones:

• Los jugadores deben lanzar el balón de tal manera que este gire 3 hercios, es decir, que de tres vueltas hacia atrás antes de llegar al aro. Si la pelota gira hacia atrás y bota contra el tablero es mucho más probable encestar que si no gira o gira hacia delante.
• El tiempo en el que el balón tiene que estar en el aire debe ser de un segundo.
• El ángulo de tiro con respecto a la horizontal debe estar entorno a los 51,5º. Esto provoca que el balón llegue justo al aro pero con la menor velocidad posible.

2. La canasta encestada a mayor distancia está a 201 metros

En 2018 el equipo de youtubers australianos conocido como How Ridiculous e integrado por Derek Herron, Brett Stanford y Scott Gaunson batió el récord Guinness tras encestar la canasta a mayor altura del mundo. El lanzador se situó sobre la cima de una montaña a más de 201 metros, en plenas cataratas de Maletsunyane (Lesoto).

Esta es la quinta vez que este popular grupo bate un récord de estas características desde que se juntaran por primera vez en 2009 para realizar todo tipo de retos en su patio trasero. Entre sus “méritos” destaca el récord de putt de golf más largo con 120 metros

La presión interna del balón es de unos 0,55 bares

Según recoge el reglamento de la FIBA, la presión interna de un balón de baloncesto debe ser tal que si lo soltáramos desde una altura de 180 cm este debe rebotar hasta una altura que oscila entre 120 y 140 cm.

Para lograr este “efecto” es necesario que los balones, independientemente de la talla, reciban una presión de 0,55 bares, lo que además maximiza su duración. Si no te haces a la idea, imagínate que estuvieses buceando, ¡sería el equivalente a tener una presión a 5 metros de profundidad!

3. La velocidad que alcanza el balón es de unos 15 m/s

Se ha medido las velocidad que pueden alcanzar las diferentes pelotas y balones utilizados en cada deporte. En el baloncesto, en un pase rápido o tiro de triple, se ha comprobado que esta velocidad puede alcanzar los 15 metros por segundo. Es el equivalente a que tu pelota fuese en un coche a unos 54 km/h, una velocidad más que considerable.

Sin embargo está muy lejos de la velocidad que se alcanza en otros deportes donde el balón se controla/golpea con el pie como en el fútbol o el rugby. Un buen ejemplo de ello es el récord que alcanzó el futbolista brasileño Ronny Heberson en 2006 jugando para el Sporting de Lisboa, donde en uno de sus disparos el balón alcanzó los 211 km/h.

4. El récord de botes a un balón es de 609 veces en un minuto

Leon Walraven es un joven holandés que tiene el honor de aparecer cinco veces en el Libro Guinness de los Récords gracias a su asombrosa facilidad para dar toques con la pelota ya sea con el hombro, la espinilla o la planta del pie. Sin embargo, en 2017 decidió cambiar el balón de fútbol por el de baloncesto, anotándose un nuevo récord, al lograr el mayor número de botes con un balón de basket en un minuto, con un total de 609. ¡Eso es más de 10 botes por segundo!

Entre las precisiones establecidas para la consecución de la marca, se encontraba el uso de un balón aprobado de forma oficial por la FIBA, que debía estar completamente inflado. El récord anterior estaba en manos del nepalí Thaneswar Guragai, quien en 2010 consiguió hacer un total de 444 botes.

5. Los triples no son estadísticamente las canastas más rentables

Hay estudios que demuestran que, en función de los porcentajes de acierto y los puntos reales que aportan, hay más rentabilidad a la hora de realizar un tiro a una distancia u otra de la canasta. Por ejemplo, las canastas bajo el aro aportan aproximadamente 1,5 puntos por tiro, este valor decrece hasta que llegamos a los triples, que aportan únicamente 1,1 puntos por tiro. Por el contrario, un tiro desde 1,25 metros aporta hasta 1,5 puntos por tiro.

Como has comprobado, existen una infinidad de curiosidades científicas relacionadas con el baloncesto, así como de otros muchos deportes. Desde la UEMC te invitamos a que conozcas algunas de nuestras titulaciones relacionadas con la ingeniería como es el grado en Ingeniería Informática o el de Ingeniería de Organización Industrial. Y si lo tuyo es el baloncesto, el grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte es tu titulación. Llama al 983 00 1000 y recibe toda la información.