Cuando los estudiantes regresan de una estancia internacional el comentario común es: “ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida”. Hay una frase que se utiliza entre los alumnos que han disfrutado de una experiencia Erasmus y que se utiliza a modo de contraseña para reconocerse entre ellos: "Once Erasmus, always Erasmus".
Los que ya lo han sido saben de lo que hablo, son parte de una especie de club al que solo se puede entrar de una forma. El haber sido beneficiario de una beca Erasmus te acompañará toda la vida y cualquiera de los participantes del programa te podrá dar mil motivos: conocer otras culturas, aprender otro idioma, relacionarte con gente interesante o simplemente vivir un año alejado de "tu ambiente" son sólo algunos de ellos.
Particularmente he seleccionado las diez razones por las que te tienes que ir de Erasmus que me parecen más importantes (después de mi propia experiencia hace ya 23 años):
Es un recuerdo para toda la vida
Siempre habrá algo que te haga volver a ese momento: una anécdota (el día que nos perdimos por esas calles de Berlín), una comida (aquél maravilloso Irish Breakfast que nos metimos entre pecho y espalda en esa taberna de Montague Street), una amistad (ese colega valón que no tenía ni papa de inglés)… Batallitas que seguro terminarás contando a tus nietos.
Mejorarás tus competencias lingüísticas y culturales
Francés, italiano, inglés... no importa, lo más efectivo es la inmersión de toda la vida, porque para aprender un idioma hay que vivirlo. ¿Recuerdas cuando llegaste al aeropuerto de Varsovia y no sabías ni pedir un taxi? Te aseguro que después de seis meses sabrás recitar el alfabeto polaco sin inmutarte (bez przerwy).
Ester Martínez, antigua alumna del doble grado en periodismo y Comunicación Audiovisual, durante su erasmus en Milán
Superarás un gran reto personal
Otra de las razones para ir de Erasmus es que podrás resolver cuestiones de la vida diaria a las que no te habías enfrentado antes, desde poner una lavadora hasta abrir una cuenta bancaria (sí, parece fácil esto último, hasta que intentas buscar un banco en Manchester y no sepas diferenciar entre este y una casa de empeños o de cambio de divisas). Todo es un reto, una especie de carrera de obstáculos con ese chute de adrenalina al final cuando controlas no solo esas situaciones sino todas las que puedan venir.
Nuevas experiencias y amigos
Salir de la zona de confort, la emoción de hacer cosas por primera vez y hacer amigos que al final, más que amigos serán familia. Eso sí, intenta no juntarte sólo con españoles. ¡Queremos que vuelvas hablando alemán no español con acento extremeño!
Paula Rojo, estudiante del grado en Fisioterapia, con un grupo de amigos en la Plaza de San Marcos en Venecia
Desarrollarás nuevas aptitudes
Tolerancia sobre todo. Dirás adiós a todos esos tópicos e ideas preconcebidas, hasta los que no sabías que tenías. Déjate llevar y disfruta de esa gran nación de naciones que es Europa.
Nuevas formas de aprender
Otro idioma, otros profesores, nuevas metodologías docentes... Cada maestrillo tiene su librillo y cada país y universidad su estilillo. Y cuando vuelvas no dudes en contarnos qué es lo que más te ha gustado.
Mejorar el curriculum vitae
Hay procesos de selección que llevan a cabo grandes empresas en las que uno de los requisitos es ser alumno Erasmus. También existen webs como Recruting Erasmus que te ayudarán a encontrar empleo, incluso después de haber finalizado tu estancia.
Viajarás y conocerás lugares nuevos
No sólo tienes que limitarte a tu destino. En todos los país que participan de este programa existen una delegación de Erasmus Student Network (ESN), se trata de una asociación de estudiantes internacional que organizan un montón de cosas chulas: excursiones, eventos deportivos, culturales o city tours. Además, con su tarjeta podrás disfrutar de un montón de descuentos que te serán de gran ayuda en el día a día.
La estudiante de Periodismo Ana Lucas frente a bastión de los Pescadores en el castillo de Buda en Budapest
Ampliarás tu repertorio de anécdotas
Tanto que tus amigos de toda la vida te empezarán a mirar con cara de “vaya, otra anécdota del Erasmus”. No les hagas caso, es la envidia que les corroe.
Celebrarás todas las fiestas regionales-tradicionales habidas y por haber
Desde el Oktoberfest, pasando por San Patricio y o el Día del Rey. Porque vayas donde vayas siempre habrá alumnos Erasmus de otros países creando un microcosmos muy particular.
Manuel Fuentes, estudiante del grado en Publicidad y Relaciones Públicas, durante el Carnaval de Niza
Y llegados a este punto es posible que aún tengas dudas, pero no dejes que la incertidumbre de enfrentarte a una situación desconocida te impida tener la experiencia de tu vida. Además, la Universidad Europea Miguel de Cervantes cuenta con una Oficina de Relaciones Internacionales en la que te ayudaran a preparar tu Erasmus. ¿Y a qué países puedo ir a estudiar? Hay muchos: Polonia, Francia, Italia, Alemania... todo dependerá del grado que estudies y de las ganas de aventura que tengas.
Y recuerda, que el miedo no te pare. Como decía Séneca: “Dejarás de temer cuando dejes de esperar”, así que no pierdas ni un instante y lánzate. Seguro que no te arrepentirás.
C/Padre Julio Chevalier, nº 2. 47012
Valladolid (España)
Llamanos al (+34) 983 00 1000
¿Te ha gustado el artículo?
No se te olvide compartir en redes sociales